No me gusta comprar maquillaje. Bueno, bases,
correctores y algún capricho siempre cae. Pero si me dedico a seguir las
tendencias podría tener un gran desastre económico en casa… Y a veces con lo
que ya tenemos, las mezclas que podamos hacer, el reciclaje de cosméticos… Pero
como he dicho, algún capricho siempre cae… Y ha caído. Y quién me lo iba a
decir a mi que ha sido de O Boticário… Y nada más y nada menos que… ¡Un lápiz
de labios! No de los que sirven para delinear, sino de los que, con forma de lápiz
gordito hacen las veces de barra de labios…
O Boticário no deja de sorprenderme. Ofrece
productos sencillos que a priori podrían parecer poco interesantes, pero en
realidad, además de una amplia gama, siempre hay buenos resultados y a un buen
precio.
Yo nunca había usado un lápiz de este tipo. Bueno,
miento, en realidad para ocasiones concretas: maquillaje de disfraz o teatro,
por ejemplo… Pero no me acababan de convencer, rascaban, duraban poco, eran
duros… ¡Y sorpresa!
Os presento el lápiz de labios MALVA GLOW que
pertenece a la gama de maquillaje MAKE B, más concretamente a su colección LUMIÈRE.
Lo primero que debo deciros es que aunque se llame “malva” su tono es un
tostado suave, marroncito toffee… Eso sí, presenta unos reflejos rosaditos muy curiosos...
La colección ofrece otros tres tonos más que
podréis ver en su web: Malbec, Pepper y Rose.
Un color tostado con reflejos rosados... Paciencia, la cámara y yo
aún nos estamos conociendo...
Su color me ha encantado, porque es un tono
que iba buscando hacía tiempo. Este lápiz tiene un ligero efecto brillo, es
intenso y jugoso, y aunque tiene partículas diminutas como de purpurina, no lo
son exactamente por lo que se desmaquilla fácilmente.
MUAC!!!
De gran duración, es tan cremoso y suave que
podría pasar por una barra de labios. ¡Ahora me voy a enganchar a este formato,
seguro! Le he sacado punta tan solo un par de veces y eso que le estoy dando bastante
trote, porque me gusta aplicar una cantidad generosa para un color más intenso…
Valeee, lo mío no es la fotografía, y mucho menos el poner morritos... Disculpad la foto, solo practicando se aprende, y aunque borrosona... ¡el color se distingue!
Al principio de usarlo deja cierta sensación
pegajosa que disminuye en pocos minutos y que ni siquiera se nota si debajo
utilizas una gran capa de cacao u otra barra de labios. Aún y así, es muy
hidratante, no reseca… ¿Otro punto a favor? Su aroma, irresistible. Huele tan
rico, a golosina, como a melocotón de chuchería… ¡Así da gusto!
Parece que no se le puede pedir más…
Bueno, en realidad, no lleva protección solar
y eso no acaba de gustarme. Lo utilizo en el trabajo, porque tiene un formato cómodo
de llevar encima y fácil de usar pero para la calle hay que poner una capita de
protector o cacao con protección por lo que el color puede cambiar y claro, ya
no es lo mismo…
¡Habrá que pedirle a O Boticário que ponga
protección solar a sus labiales! ¿Qué os parece? ¿Habéis probado sus gamas de
color?
Soraia
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