Aceite corporal cítrico de Matarrania, irresistible.

La primera vez que oyes hablar de la cosmética “slow” no sabes muy bien qué pensar. A mi me llegaban imágenes de fantásticos y largos momentos de cuidarse y mimarse. Algo imposible teniendo en cuenta lo acelerados que vamos… Hasta que empecé a meterme en el mundillo de la cosmética Bio y entendí lo del concepto SLOW… Disfrutar. Se trata de regalarse los mismos cinco minutos que utilizas en ponerte tu crema habitual en usar un producto mucho más placentero, natural, de textura especial y aroma increíble…

A mucha gente le cuesta cambiar a la cosmética natural porque no está acostumbrada a los fuertes aromas, a las texturas más untuosas, pero yo ya no sabría pasar sin ella. Como os comenté hace ya varios días, estoy en pleno proceso de conocimiento de la marca MATARRANIA. Así que hoy me gustaría compartir con vosotros mi experiencia con uno de sus productos: el aceite corporal hidratante CÍTRICO.

Aunque también estoy probando su hidratante facial y su contorno de ojos, de estos os hablaré más adelante, para poder tener mayor tiempo de uso y así observar los resultados a largo plazo. Pero no podía esperar más para compartir mis impresiones sobre su aceite corporal. Por su aroma, su textura… ¡Os cuento!

Se trata de un aceite ligero, para masaje hidratante de la piel del cuerpo. Con muy poquita cantidad ya se consigue una piel satinada y elástica. En pocos días la piel se nota más tersa, os aseguro que mis piernas de cocodrilo han dejado de serlo… Lo mejor que tiene es que no es nada graso, penetra al instante dejando un aroma sutil y delicado. Aún y así si se usa una cantidad mayor se facilita el masaje.

100% Bio, este aceite hidratante tiene como base el aceite de almendra y el de oliva y además lleva aceites esenciales de limón, naranja y mandarina. Así que su aroma cítrico es perfecto para usarlo por la mañana (para un aporte de energía, gracias al limón) o por la noche (para un momento de relax gracias a la naranja y la mandarina)

Aunque de formulación sencilla, que sería fácil de realizar en casa, es una opción muy buena para aquellos que no tenemos un gran surtido de aceites esenciales y vegetales. Es un aceite hidratante básico y muy fácil de usar. Por supuesto, para resultados más concretos, se tendría que alternar con algún cuidado específico: antiestrías, anticelulítico… 

Lo que más me ha gustado de este aceite es que es muy versátil: para el cuerpo en general pero también para cuidar las manos, los codos, las rodillas, los talones... y esas zonas rugosas que tanto nos molestan. Su aroma es delicioso y es un gustazo utilizarlo. 

¿Qué os parece? ¿Os animáis a probarlo? ¿Ya conocéis MATARRANIA?